La política exterior argentina, entre revoluciones, golpes y dictaduras. La gestión diplomática del almirante Samuel Toranzo Calderón en España (1955-1959)

Abstract

Delineados los principios internacionales que pretendería mantener la "revolución libertadora" -alineamiento junto a las naciones occidentales, abandonando las menciones a la Tercera Posición del peronismo; acercamiento a Washington; vinculación natural con los países fundadores de la nacionalidad y los pueblos americanos; normalización de los vínculos con el Vaticano; ingreso a organismos financieros globales-, el rápido desplazamiento del primer elenco gobernante no modificaría en lo sustancial su política exterior. Al frente del gobierno provisorio, el general Eduardo Lonardi había indicado el nombramiento de numerosos militares de las tres armas en cargos diplomáticos. El almirante Samuel Toranzo Calderón fue designado embajador en la España de Franco. El cargo diplomático desempeñado fue un paréntesis profesional y vital, eficaz en sus resultados inmediatos para el país, pero expresión en el exterior de una imagen proyectiva de la Argentina que no tenía total reflejo en la realidad. Cuando se pensaba que Argentina había llegado a la "hora de la ley". con la elección presidencial de Frondizi, Toranzo Calderón optó por encaramarse en posiciones de liderazgo en las conjuraciones de hombres símbolo de la "revolución libertadora", que persistían en querer establecer por la fuerza una democracia "verdadera", una democracia para los democráticos, al decir del almirante Isaac Rojas.