Animalidad y estética de excesos en la literatura argentina

Abstract

En este artículo se analiza el relato "El Fiord" (1969) del escritor argentino Osvaldo Lamborghini. Para esto, pensando desde la perspectiva estética de la literatura, consideramos importante ver cómo desde lo corporal-simbólico es posible señalar un una presencia animal vinculada con la violencia y lo político. Esto está estrechamente ligado con el trabajo con el lenguaje y con el proceder escritural. La cultura que se construye en el relato, se encuentra signada por espacios liminales y por una serie de rituales e imágenes grotescas del cuerpo en exhibición, deforme y degradado, que están íntimamente asociados con aspectos políticos que producen una identidad erigida en prácticas sociales caracterizadas por la violencia y la sexualidad. Es a través de la violencia y en los procesos de configuración animal, cuando los cuerpos entran en contacto y luchan creándose tensiones en las relaciones de poder, una politización del cuerpo. Los usos físicos del cuerpo, producen efectos como el dolor, el asco, la ira, la morbosidad que instauran vínculos conflictivos entre las fuerzas sociales y la violencia corporal, la política y la sexualidad. Dentro del espacio de una pequeña habitación donde se encuentran personajes ex militantes peronistas, los excesos de las prácticas sexuales culminan con un banquete antropofágico. Se articula la violencia (en el cuerpo, en el lenguaje), la animalización en las relaciones físicas, la penetración y despedazamiento de la carne.

Neste artigo se analisa o relato “El Fiord” (1969) do escritor argentino Osvaldo Lamborghini. Para isto, pensando a partir da perspetiva estética da literatura, consideramos importante ver como desde o corporal-simbólico é possível apontar um a presencia animal vinculada com o político e o animal. Isto está ligado ao trabalho com a linguagem e com o processo da escrita. A cultura ali construída se encontra caracterizada por espaços liminares e por uma série de rituais e imagens grotescas do corpo em exibição, sem forma e desagregado, que estão intimamente associados a aspetos políticos que produzem uma identidade erigida sobre práticas sociais particularizadas pela violência e pela sexualidade. É através da violência e dos processos de configuração animal que os corpos entram em contato e lutam, de modo a criar tensões nas relações de poder, trata-se de uma politização do corpo. Os usos físicos do corpo produzem efeitos como a dor, o asco, a ira, a mobidade que instauram vínculos de conflitos entre as forças sociais e a violência corporal, a política e a sexualidade. Dentro do espaço de uma pequena habitação onde se encontram personagens que são ex-militantes peronistas, os excessos das práticas sexuais culminam em um banquete antropofágico. Articulam-se à violência (no corpo, na linguagem), a animalização nas relaciones físicas, a penetração e o despedaçamento da carne.