El fucilazo de un genio: Mariano Moreno en La evolución de las ideas argentinas de José Ingenieros

Abstract

El ensayo pretende mostrar cómo José Ingenieros explica que la conciencia social es heterogénea, fundamentalmente en el seno de la masa del pueblo. Son las élites las que detentan los ideales comunes. Pero al interior de estas, si las clases propietarias son esencialmente conservadoras, en cambio, la juventud ilustrada es visiblemente revolucionaria. La voluntad social de progreso, sostiene Ingenieros, es un privilegio de pequeñas minorías que se anticipan a su tiempo, y los cambios que éstas piensan y ejecutan suelen ser más tarde aprovechados por los otros grupos que las imitan. Su tesis sugiere que las masas populares tienen por misión conservar lo que antes fue iniciativa de sus núcleos innovadores, y más aún si se trata de minorías revolucionarias. Estas son portadoras y agentes de las «fuerzas de variación», generadoras del cambio y anticipatorias del porvenir, a su vez enfrentadas a las «fuerzas de herencia», que constituyen la tradición y consolidan el pasado. Por ello existe un vaivén continuo entre la remoción de las ideas y las instituciones, pugnando por su legitimidad. No hay progreso sin conflicto, en suma. Es el producto de la lucha de la variación contra la herencia, de los melioristas contra los tradicionalistas.