Tebas escindida: la simbología del espacio en el prólogo de Bacantes de Eurípides

Abstract

En el comienzo de Bacantes de Eurípides asistimos a una ciudad atravesada por la escisión, tanto de su población (una parte, la femenina, habita ahora el ambiente montaraz) como de su consenso interno (la otra parte, enfrentada entre sí como lo grafica el conflicto entre Penteo y el dúo Tiresias-Cadmo). Para el cierre de la obra, la devastación de Tebas se encarna en la destrucción de su oîkos principal. La invasión del elemento salvaje que se adueña del núcleo urbano se replica en el cuerpo descuartizado del titular de la autoridad con la que la pólis se identificaba (Penteo) y se consuma con el abandono de la ciudad de los otros personajes pertenecientes a aquel oîkos principal (Ágave y Cadmo) para ser ocupado por un coro de bacantes asiáticas cual ejército invasor. El objetivo de este capítulo es relevar en el prólogo emitido por Dioniso las referencias al espacio (y en especial el de la pólis) a fin de analizar sus cargas sémicas y a la vez advertir la homología entre los movimientos generados por el lógos del dios y los que se desprenden de la narración de una escena clave de la trama, el sparagmós de Penteo. Tengamos en cuenta que, al tratarse de una tragedia donde las estructuras de la ciudad se desintegran, las marcas espaciales son cruciales por cuanto sirven precisamente para habilitar y graficar el desborde.