Del realismo figural a la imagen dialéctica: notas para una lectura del Cordobazo

Abstract

Desde Figural Realism. Studies in the Mimesis Effect (1999), Hayden White sostiene que la teoría de la narración histórica debe atender a lo que el autor caracteriza como acontecimientos modernistas, es decir, aquellos que el modernismo hizo posible, que exhiben una naturaleza novedosa y un evidente carácter traumático. Está pensando en las dos guerras mundiales, los genocidios, el crecimiento abrumador de la población mundial, la pobreza expandida en la mayor parte de la población global y las hambrunas a escala inimaginable, entre otros factores vinculados a las explosiones nucleares y el desastre ecológico. Es por eso que implican una revisión del concepto mismo de acontecimiento y nuevas categorías y convenciones para atribuirles significado. En modo similar, Walter Benjamin llamó la atención sobre el pensamiento histórico en esta mutación de la estructura de la experiencia moderna. No hace falta más que recordar la distinción que el autor establece entre experiencia(Erfahrung) y vivencia (Erlebnis) en un clásico texto de los años treinta, Experiencia y pobreza. Allí aparece una distancia irreductible entre la experiencia comunicable, recogida de la tradición y transmitida de generación en generación, y la vivencia que es reactiva frente a los estímulos intensos ante los cuales se resiste la formulación lingüística y sus convenciones. Es en esta dirección que Benjamin conceptualizó la denominada imagen dialéctica para dar cuenta de una experiencia de la temporalidad que no se conforma con la correspondencia de la linealidad convencional entre pasado, presente y futuro.