Diseño de puntas de proyectil, sistemas de armas y prácticas cinegéticas en el tránsito a la producción de alimentos en Antofagasta de la Sierra (Puna argentina): Discusión de datos y problemáticas

Abstract

La micro-región de Antofagasta de la Sierra (Puna de Catamarca, Argentina), cuenta con una vasta tradición en el estudio de los sistemas de armas, las estrategias cinegéticas y los paisajes de caza (Aschero y Martínez 2001; Martínez 2003, 2007; Moreno 2013; entre otros). A escala regional y macro-regional también se dispone de información relevante(Ratto 2003, 2012; De Souza 2004, 2006; Moreno 2011, 2012, 2013; Restifo2013). En la secuencia arqueológica local, destaca un aumento exponencial en la cantidad de diseños de puntas de proyectil en el lapso 4500-3000 AP, en relación a momentos previos y posteriores, al considerarla Quebrada de Las Pitas y, dentro de ésta, 2 localidades arqueológicas inmediatas, Punta de la Peña y Peñas Chicas. En este momento, varios sitios residenciales relativamente sincrónicos cuentan con un repertorio diferencial de diseños pedunculados y apedunculados muy característicos descriptos en detalle desde un punto de vista tecno-tipológico (Hocsman 2006, 2010, 2014). Coincidentemente, tienen lugar importantes cambios socio-económicos vinculados al tránsito de cazadores-recolectores a sociedades agro-pastoriles(Hocsman y Babot 2018). No obstante el inicio de prácticas ganaderas, la cazacontinuó siendo importante, aún en contextos agro-pastoriles plenos (Olivera1998).En este marco, es preciso trabajar en la identificación de los sistemas de armas utilizados en el lapso abordado, unaspecto no estudiado localmente. La información generada estaría de acuerdo con la información local y regional, ya que se presentarían puntas de proyectil de lanza, de propulsor y de arco y flecha. Esto podría dar cuenta de una especialización en la captura del recurso faunístico por excelencia de la Puna, el camélido (vicuña o guanaco), señalada por Yacobaccio (1998), que combinaba diferentes sistemas de armas, distintas prácticas predatorias (por ejemplo, predación sobre grupos familiares o de individuos aislados, caza individual, en grupos acotados o colectiva, etc.) y utilización de diferentes topografías. Sin embargo, dada la multiplicidad de diseños de puntas de proyectil (n: 13) y dela presencia diferencial de estos diseños en los distintos sitios, es preciso establecer cuáles se vinculan a lanza, cuáles a propulsor y cuáles a arco y flecha. La pregunta concreta es cómo están representados los sistemas de armasen función de los diseños en cada sitio, y sus diferencias intersitio. Al respecto, una alternativa, no contradictoria a la ocurrencia de especialización, refiere a la demarcación de identidad al considerar las puntas de proyectil hacia los 3500 AP en la Quebrada de Las Pitas (Hocsman 2006, 2014). Situación que adquiere sentido al poner en juego los trabajos de Aschero (2006, 2007) acerca de la presencia de diferencias estilísticas en el arte rupestre de este momento entre distintas porciones de la micro-región en un contexto de territorialidad marcada y de la ocurrencia de diferencias en los diseños de puntas de proyectil entre quebradas en el área (Hocsman y Babot 2018). De esta forma, en un espacio fuertemente particionado y con restricciones de acceso, los lugares de caza son sectores plausibles de señalización de identidad, y las puntas de proyectil y los sistemas de armas asociados se constituirían en elementos cargados de sentido de pertenencia. Por otra parte, esta situación de competencia por los recursos, y la diferenciación de grupos, podría haber entrado en colisión con prácticas como la caza colectiva, lo cual es discutido a la luz de las evidencias de los paisajes de caza.