Irrigación de largo plazo como desencadenante de flujos de tierra en Chenque Malal, Norpatagonia argentina

Abstract

Los deslizamientos representan un motivo de preocupación global debido a sus impactos sociales, ecológicos y económicos. Episodios alrededor del mundo han sido asociados a causas naturales y antrópicas, sin embargo, estas últimas se encuentran poco exploradas. A pesar del desarrollo científico en los últimos años con respecto a causas vinculadas a la irrigación intensiva, los estudios sobre este tema aún son escasos. Este trabajo se focaliza en determinar la influencia antrópica en la generación de flujos de tierra por riego intensivo de largo plazo, mediante el uso de información temporal y geoespacial. El análisis se llevó a cabo en un sector de la Norpatagonia argentina donde se desarrolla actividad ganadera trashumante. Los resultados muestran que los aportes desmedidos de agua brindan condiciones favorables para la generación y evolución de flujos de tierra, inclusive en condiciones de déficit hídrico. Producto de ello, el 22 de septiembre de 2020 se registró un colapso que movilizó ~19.000 m³ de tierra a lo largo de 360 m, el cual produjo pérdidas económicas estimadas en 168.000 USD. Es factible que otros deslizamientos se produzcan en el área ante el mantenimiento de estos aportes de agua.

Because of their social, ecological, and economic impacts, landslides are an issue of global concern. Episodes occurring worldwide have been associated with natural and human causes, although the latter have been poorly explored. Despite recent scientific insight into intensive irrigation as a cause, research remains scarce. This paper focuses on determining the anthropogenic influence on the triggering of earth flows by long-term intensive irrigation, based on temporal and geospatial information. This analysis covers a sector of Northern Patagonia in Argentina, an area of transhumant pastoralism. Our results show that excessive water input creates favorable conditions for the triggering and evolution of earth flows in the region, even under water deficit conditions. As a result, on 22 September 2020, a collapse was recorded which mobilized ~19,000 m³ of earth debris along 360 m and produced economic losses estimated at 168,000 USD. Other landslides are expected to occur in the area if irrigation amounts remain at the same level.