DILP8 coordina el crecimiento de los tejidos con el desarrollo para mantener las proporciones del cuerpo

Abstract

La forma y el tamaño de los organismos están establecidos por un programa genético de desarrollo. Este programa presenta cierta flexibilidad que le permite adaptarse a los cambios de un ambiente variable y compensar las alteraciones del crecimiento para producir un fenotipo estable aún en condiciones cambiantes. Esta plasticidad del desarrollo implica la existencia de una forma de comunicación entre órganos para coordinar su crecimiento y mantener las proporciones. DILP8, un nuevo miembro de la familia de la insulina, es la hormona producida en respuesta al daño por los discos imaginales. Actúa sobre los centros hormonales que regulan el desarrollo prolongando la fase larvaria y permitiendo la regeneración de los tejidos. La incapacidad de poner en evidencia el daño en ausencia de dilp8 resulta en la pérdida de coordinación entre los órganos en crecimiento y la generación de individuos asimétricos