Artículo
La historia del capitalismo permite cuestionar a la economía de mercado como garante de las condiciones necesarias para la vida digna de las personas. El mundo del empleo muestra recurrentes crisis, acrecentando los niveles de desigualdad y exclusión. Hoy en nuestra región atravesamos un contexto de fuertes transformaciones socio-políticas, en el marco del agotamiento y crisis de los progresismos, y del avance de perspectivas conservadoras.La crisis actual, que no solo es económica, sino también ambiental y cultural, dio lugar a construcciones sociales, políticas y económicas desde abajo, donde las realidades materiales y las subjetivaciones derivadas ponen en juicio la hegemonía de algunos conceptos como cálculo, trabajo y desarrollo, entre otros. Lo que conocemos y teorizamos como el desarrollo capitalista de las sociedades modernas no logra dar cuenta de la diversidad de procesos que engloba esta noción y mucho menos explicar su existencia dentro del sistema. En ese sentido, el campo de la Economía Social y Economía Solidaria tiende a asociarse a un conjunto amplio de prácticas que promueve valores y principios diferentes de los que se reproducen en una economía de mercado, ya que buscan mejorar la calidad de vida de las personas a partir de la asociatividad y el trabajo colectivo. Cuando hablamos de ?otra economía?, señalamos una diversidad de paradigmas, de matrices de pensamiento y de concepciones del mundo que en nuestras sociedades se encuentran entrelazados de forma jerárquica y conflictiva. Si existe otraeconomía, es porque se produce una interpelación problemática de lo que se presenta como ?lo económico? con pretensiones hegemonizantes, de un saber particular que se impone como universal y único. En la construcción de esa otra economía, las prácticas autogestivas constituyen un cuestionamiento abiertoa la lógica del mercado como único mecanismo de organización de la dinámica económica, cuyo horizonte consiste en la subordinación del trabajo a las leyes de la oferta y demanda. Enterprises recuperated by their workers constitute experiences of so¬cial change in production. After more than a decade since its diffusion and expansion in Argentina, in this paper we assess the socio¬productive form to which these processes have given rise, inquiring to what extent it implies social empowerment. From a panoramic pers¬pective, which draws on both our own studies and researches developed by other teams, we carry out a characterization of enterprises re¬cuperated by their workers in order to point out potentials and limitations in terms of the dynamics of change and the increase of social power they express. The hypothesis sustained here is that these enterprises configure a form of commodity production by associated wor¬kers, which combines the predominance of social power within the productive unit with competition in the capitalist market.
Las prácticas de la economía social y solidaria en América Latina
Fecha de publicación:
11/2018
Editorial:
Universidad Nacional del Nordeste. Centro de Estudios Sociales
Revista:
De Prácticas y Discursos
ISSN:
2250-6942
e-ISSN:
2250-6942
Idioma:
Español
Tipo de recurso:
Artículo publicado
Clasificación temática:
Resumen
Palabras clave:
PRÁCTICAS
,
OTRAS ECONOMÍAS
,
MERCANTILIZACIÓN
,
AUTOGESTIÓN
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Citación
Pegoraro, María Laura; Gomez, Cesar; Sarachu, Gerardo; Las prácticas de la economía social y solidaria en América Latina; Universidad Nacional del Nordeste. Centro de Estudios Sociales; De Prácticas y Discursos; 7; 10; 11-2018; 3-7
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