Emociones, preocupaciones y reflexiones frente a la pandemia del COVID-19 en Argentina

Abstract

El objetivo de este trabajo es explorar los sentimientos y expectativas que genera el COVID-19 en Argentina durante la primera etapa de la pandemia. Se aplicó una encuesta de la Organización Mundial de la Salud adaptada al contexto local. Se incluyeron preguntas abiertas para indagar sentimientos de las personas frente al COVID-19, y se realizó un análisis de contenido. Como resultados se advierte que la población encuestada siente incertidumbre, miedo y angustia, pero también emerge un sentimiento de responsabilidad y cuidado frente al COVID-19. Así mismo se destacan sentimientos positivos para la sociedad como una valoración de la interdependencia social. Los resultados arribados señalan que el impacto en la salud mental es desigual según el género, el nivel educativo alcanzado y el confort percibido en el hogar.El estudio permite concluir que las dimensiones emocionales y vinculares de las personas resultan aspectos centrales ante la pandemia del COVID-19 en Argentina. Es recomendable que estas dimensiones, así como y su impacto subjetivo y social diferencial entre los diversos grupos poblacionales, sean consideradas en la planificación de políticas para afrontar el COVID-19.

The aim of this work is to explore the feelings and expectations that COVID-19 generates in Argentina during the first stage of the pandemic. A survey of the World Health Organization adapted to the local context was applied. Open-ended questions were included to study people\'s feelings about COVID-19. A content analysis was carried out. As results, it can be seen that the surveyed population feels uncertainty, fear and anguish, but a feeling of responsibility and care against COVID-19 also emerges. Moreover, positive feelings regarding society stand out as an assessment of social interdependence. The results obtained show that the impact on mental health is unequal according to gender, educational level, and perceived comfort at home. The study concludes that the emotional and bonding dimensions of people are central to face this pandemic and should be considered in the design of policies that address the needs of population groups who suffer differently the subjective and social impact that produces the COVID-19.